jueves, 28 de junio de 2012

Expediente X

Increíble pero cierto. Dos semanas para poner una dinamo. Y lo que quede, porque todavía no debe estar.

El lunes en el Lidl hay un foco con muy buena pinta. Igual me acerco a mirarlo, y de vuelta entro a por la bicicleta.


martes, 26 de junio de 2012

Esperandooo...

Sigo esperando pacientemente a que me devuelvan mi bicicleta.

Pues sí que es complicado poner una dinamo, más que aprender a montar me está costando.


viernes, 22 de junio de 2012

Localizada

Pues la bici todavía no está. Les falta un cable para empalmar no sé qué.

Pero el lunes la tengo lista.


jueves, 21 de junio de 2012

Se busca

Por cierto, ¿qué pasa con mi bici? ¿Dónde está? ¿Qué están haciendo con ella?

¡Snif! La echo de menos.


Remontando

De bajón, nada. Tenía la espinita de aprender a montar desde hace años y lo he conseguido.


martes, 19 de junio de 2012

Equipación para la ciudad

Un accesorio nuevo para la bici, aunque quizás sea un poco radical... o a lo mejor no tanto, porque hay veces...


lunes, 18 de junio de 2012

Me rindo

Iba a Correos a devolver la dinamo y se me ha ocurrido entrar en la tienda de bicis a preguntar si tenían ellos y me la ponían -que evidentemente sí. Van a ponerme la que tengo. ¡Son de lo más majos!


sábado, 16 de junio de 2012

Nada, que no

Maldita dinamo. No consigo que funcione, ni siquiera con la asistencia técnica del vendedor, que contesta pacientemente a todas mis quejas.


jueves, 14 de junio de 2012

De bajón

Estoy de crisis existencial. A ratos pienso en vender la bicicleta. Total, me caigo cada dos por tres...

Y si no, se le rompe algo.


lunes, 11 de junio de 2012

Dinamo

Dudo entre llevar la bici al taller para que me pongan la dinamo o comprar una y hacerlo en casa.

En el Decathlon ya no tienen, así que termino comprándola por Internet en la única página que encuentro que las vendan.


jueves, 7 de junio de 2012

martes, 5 de junio de 2012

Veo luces de colores

Efectivamente, la dinamo se ha roto. Así que tengo que comprar otra, o poner una luz delantera nueva.

Primero busco dinamos. Todas son iguales... o no. La diferencia de precio me desconcierta bastante. Y también hay bujes con dinamo, aunque eso supone cambiar cosas que ahora mismo están nuevas.

Luces delanteras encuentro para aburrirme. En principio descarto las de posición, porque prefiero un foco que de paso me sirva para ver a mí también.

Buenooo... me pasa como con las traseras, hay tantas que no me decido. Además de las que se cargan por USB o con luz solar, ahora veo otras con cargador de corriente, que me parece mucho más cómodo. Y algunas de éstas llevan pilas recargables, no una batería, por lo que cambiarlas si se estropean será también más sencillo.

Luego hay que valorar cuánto iluminan realmente, porque la información que dan las marcas de leds, lumens y demás, a veces es tan dispar que no sabes si fiarte.

El problema es que si pongo una de éstas tendría que desmontarla y meterla en el bolso siempre que dejara la bicicleta en la calle, y eso es un rollo. En cambio, el foco que tengo ahora está fijo, es un zarrio y nadie se va a molestar en robarlo.

Y eso me lleva de vuelta a la opción de cambiar la dinamo.


Actualización


Parte médico

¡Vaya nochecita he pasado!

Del golpe en el hombro, que es lo único que he sentido al caer, nada de nada. Pero el costado me duele una barbaridad. Y el pie lo llevo a rastras y ahora mismo parece un botijo.


lunes, 4 de junio de 2012

En bici al trabajo: casi, casi

Como no hace demasiado calor me voy a validar el registro de la bicicleta.

Podría ahorrarme un trozo en el tranvía, aunque la otra tarde me tuve que bajar porque se estaba llenando y hoy es más o menos la misma hora, así que mejor me lo hago todo de tirón y me sirve de prueba.

Desde el centro cojo un trozo de carril-bici nuevo. Doy más vuelta, pero al derecho me encuentro con las obras y va a ser muy complicado cruzar.

A pesar de ser un poco estrecho y comerse media docena de paradas de bus, lo cierto es que se va muy bien y llego en un momento. Los semáforos están sincronizados y me los encuentro casi todos abiertos. ¡Así da gusto!

Una vez allí me dan una tarjeta identificativa, unas pegatinas con el número de registro y un líquido para que quede marcada igualmente en caso de que intenten quitarle las etiquetas.

Me vuelvo por el otro lado, que es el camino que utilizaré más adelante para ir a trabajar. Muy parecido al trozo que he hecho de ida, a lo mejor un poquito más largo, seguramente porque ya voy más cansada.

Casi estoy llegando y en un giro meto no sé cómo la rueda en el carril del tranvía. Vuelvo a caerme y esta vez me hago daño, pero de verdad. Y menos mal que no llevaba ningún coche detrás.

Me duele un pie (entre otras cosas) y la rueda trasera va muy frenada, pero puedo montar y llegar a casa, donde hago una valoración de daños:

  • el hombro derecho golpeado
  • el costado dolorido
  • la rodilla derecha desollada
  • el pie izquierdo... no sé si torcido o sólo es otro golpe
  • el guardabarros trasero desencajado
  • y la pobre cesta deformada otra vez

Pues nada, arreglo lo que puedo, me doy unas friegas y me pongo con las pegatinas.


domingo, 3 de junio de 2012

¡Pero qué pasa aquí!

Le he dado una pincelada de aceite a la cadena y me he salido un ratico para que se repartiera por todo, pero creo que me he quedado corta. Y los piñones más pequeños entran regular... y la luz no funciona... ¡aaarg!

Ya no toco nada más, que es peor.


viernes, 1 de junio de 2012

Cuesta arriba

Le voy a echar una gotita de aceite a la cadena antes de salir, que parece que canta un poco.

¡Vaya! Si cortas la cánula se queda abierto el bote y antes o después se volcará y acabará todo perdido. Ya buscaré un pincel para aplicarlo.


Más tarde...

Otros 15 kilómetros, casi todo en carril-bici, ancho y sin obstáculos. Pero a pleno sol, la vuelta ha sido una agonía.